This site uses cookies.
Some of these cookies are essential to the operation of the site,
while others help to improve your experience by providing insights into how the site is being used.
For more information, please see the ProZ.com privacy policy.
This person has a SecurePRO™ card. Because this person is not a ProZ.com Plus subscriber, to view his or her SecurePRO™ card you must be a ProZ.com Business member or Plus subscriber.
Affiliations
This person is not affiliated with any business or Blue Board record at ProZ.com.
Spanish to Italian: ACUÉSTATE Y SUDA General field: Art/Literary Detailed field: Poetry & Literature
Source text - Spanish Mañanas de hierro y noches de agua.
Me oxido en la náusea de las tardes, con el alma descalza caminando perdida sobre las brasas humeantes de lo que ha quedado de nosotros.
Las imágenes de mi mente gimen recuerdos sexuales como una grabación sádica cada vez que cierro los ojos por demasiado tiempo. Zafarrancho cardíaco me pide el cuerpo, alrededor del cuello, con doble nudo.
Navego en mi océano de colillas, hacia la tormenta, rezándole a mis huesos por hundirme, porque no vengo de vuelta de nada y no me importan las próximas mareas.
Mi reino ya no tiene sed.
Cuando las luces se apagan, me quedo quieto y hablo contigo en mi insomnio. Mi colchón transpira en la misma pesadilla que me despierta a las cinco de la mañana, cuando te busqué con mi mano entre los cartones y el frío, pero más allá del túnel, más allá de la vida, de pronto, recuerdo cuando me besabas.
Recuerdo cuando me besabas....
Recuerdo cuando me besabas...
Translation - Italian Mattini di ferro e notti di acqua.
Mi arrugginisco nella nausea del pomeriggio, con l'anima scalza camminando persa sulle braci fumanti di quello che è rimasto di noi.
Le immagini della mia mente gemono ricordi sessuali come una registrazione sadica ogni volta che chiudo gli occhi per troppo tempo.
Pulizia cardiaca mi chiede il corpo,
attorno al collo, con doppio nodo.
Navigo nel mio oceano di cicche, verso la tormenta, pregando le mie ossa di affondarmi, perché non arrivo da nessuna parte e non mi interessano le prossime maree.
Il mio regno non ha più sete.
Quando le luci si spengono, resto calmo e parlo con te nella mia insonnia. Il mio materasso traspira nello stesso incubo che mi sveglia alle cinque del mattino, quando ti cercai con la mano tra i cartoni e il freddo, però più in là del tunnel, più in là della vita, all'improvviso, ricordo quando mi baciavi.
Ricordo quando mi baciavi...
Ricordo quando mi baciavi...
Spanish to Italian: Internet, un nuevo eje dimensional General field: Social Sciences Detailed field: Philosophy
Source text - Spanish Recientemente un “amigo” en Facebook escribió: “Es Facebook la 4ta dimensión?”, no sé hasta qué punto su actualización de estado fue una frase concientemente pensada o simplemente algún tipo de intuición pasajera y efímera, en todo caso las respuestas a su inquietud no pasaron de un par de risas y comentarios superfluos. Sin embargo, esta pregunta encierra un sinnúmero de complejidades que nosotros, como primeros descubridores y exploradores del mundo digital deberíamos enfrentar. Pero antes, dejemos en claro algunos conceptos, el mundo físico en el que los seres humanos desarrollamos nuestras existencias consta de tres dimensiones espaciales en las que nos movemos y una dimensión temporal. En realidad la cuarta dimensión es el tiempo. Luego las dimensiones pueden ser diversamente definidas desde el campo de estudio desde donde se les analice.
Aunque el comentario de mi amigo en Facebook parte con un concepto equivocado sobre la cuarta dimensión, su discernimiento no es del todo incorrecto. Su duda se dirige hacia una nueva dimensión en la cual los seres humanos desarrollamos nuestra existencia, el ciberespacio. Si vivimos en tres dimensiones espaciales y una temporal, cómo podríamos definir el mundo virtual, dónde la vida parece adquirir igual significancia?
Estamos hablando de un mundo donde nuestras capacidades de abstracción se desarrollan al máximo, prescindimos casi por completo del espacio físico y el tiempo también parece incluso transcurrir a mayores velocidades. Hablamos de un mundo paralelo a través del cual recibimos la información del mundo, creamos una identidad y nos contactamos con un círculo de personas que tiene la posibilidad de ampliarse cuánto se quiera. El ser humano está viviendo cada vez más en un mundo creado por él mismo, un mundo que va creando a través del gran imaginario colectivo de la humanidad, sus propios códigos sociales, de lenguaje, económicos, amorosos, académicos, culturales, artísticos etc.
Sí, hablamos de un mundo artificial que a pesar de necesitar de elementos electrónicos para funcionar, flota con una forma definida a la cual ingresamos cada vez que encendemos nuestros dispositivos (cuántos y cuánto estamos conectados?). Pero olvidando por un momento la necesidad física de la virtualidad para funcionar, reflexionemos un momento sobre el desarrollo de nuestras existencias, como colectivo y como individuo, entre dos realidades que se mueven paralelamente y que están cambiando radicalmente nuestra manera de relacionarnos con el entorno material.
Es claro que existen dos momentos: el momento on y el momento off (debo definirlos o lo sabemos todos? Yo creo que lo sabemos todos) y muchos de nosotros podemos desdeñar en continuación sobre el momento on, diciéndonoslo a través de skype en una discusión de pareja a distancia, y cómo este roba nuestro tiempo, como si el tiempo off fuese tiempo más valioso que el tiempo on. Estar la mayor parte de nuestro tiempo online, resulta para muchos una cuestión negativa, y sinceramente este post no tiene como objetivo entrar en esta controversia. Lo que es cierto es que vivimos en un mundo en el que tenemos la posibilidad de estar el tiempo que queramos y en el momento que queramos on u off, ambos mundos han creado una dinámica en la que se alternan funciones, conviven e intercambian información de manera constante.
Estamos frente al nacimiento de un territorio nuevo, con posibilidades infinitas, que ya está aportando a la humanidad una nueva forma de raciocinio y porqué no, conciencia. Este territorio parece un reflejo de nosotros mismos sobre nuestras cabezas, corrientes eléctricas que dan vueltas alrededor del globo terráqueo, que se desprende de nosotros y del ambiente en nuestras formas más primitivas, pero que paralelamente circula y conecta por primera vez en la historia, no nuestros cuerpos sino nuestras conciencias. Así mismo, eso que se vive online influye sobre nuestra vida offline y viceversa, la línea divisoria ya no existe, el online es cada vez más parte fundamental de nuestra cotidianidad como especie. Las bases de datos de los hospitales, del gobierno, los contactos con nuestros amigos, la reserva del vuelo, el tren o el bus, la universidad, el trabajo, el dinero, todo hoy pasa a través de lo digital.
Borges, Huxley, Soja, Foucault, Lefebvre, habían ya hablado de un mundo, dimensión o realidad que supera cualquier límite que nos separe: edad, historia, geografía, cultura, religión, sexo… Borges describía el Aleph como “uno de los puntos del espacio que contiene todos los puntos”. Surge entonces esta Heterotopía, este Aleph, este Tercer Espacio, este Mundo Feliz, a partir de nuestras identidades, pero sin prejuicios formales; a partir de nuestras comunidades, sin restricciones geográficas; de nuestros conocimientos, sin límite de retroalimentación y mutación; de nuestros gustos y para todos los gustos. Simultáneamente nos enfrentamos a un tipo de conocimiento mucho más complejo que desafía nuestras capacidades cognitivas y de atención. El conocimiento nunca más será estático, las construcciones cambian constantemente, no hay nada fijo, miles de voces hablan al mismo tiempo y mientras se ponen de acuerdo nacen las ideas que al segundo siguiente se destruirán, mundos vivientes que son radicalmente abiertos y abiertamente radicalizables.
Finalmente el hombre creó para sí mismo una nueva dimensión espacio-temporal donde puede proyectarse como conciencia y no como cuerpo, una dimensión que no está sometida al espacio físico-geográfico, una dimensión que ha transformado la concepción de tiempo y velocidad y funciona bajo sus propios estándares temporales, una dimensión que pertenece completamente al imaginario del hombre y amplía la realidad geométrica en la que vivimos hasta hoy. Un lugar sin lugar con miles de puertas que lo aíslan y lo abren a todos al mismo tiempo. Una dimensión que rompe con las formas, las gramáticas, las convenciones, los tabúes, ha expandido nuestra mente de un pensamiento cúbico a un pensamiento que se extiende hacia nuevas formas en espacios y direcciones que apuntan hacia otras perspectivas casi oníricas.
Recientemente observaba un enorme barco que llegaba al puerto de la ciudad, me preguntaba quiénes iban dentro y cómo serían sus vidas. Me resultaba muy complejo imaginar la vida dentro de un hipercubo que navega en un mar que es siempre y nunca el mismo mar. Para Foucault I Navigli (los canales de Milán) y sus barcas eran la heterotopía por excelencia. Los barcos que llegan a este país en el pacífico suramericano vienen de la India, Inglaterra, China, traen mercancías, negocios, conexiones, historias, curiosidad. El mundo existe también más allá del horizonte, no termina nunca. Todo está pasando aquí y ahora, en todas partes y en todos los momentos.
Translation - Italian Recentemente un amico scrisse su Facebook: “Facebook è la quarta dimensione?”, non so fino a che punto questo aggiornamento del suo stato fosse una frase pensata coscientemente o un barlume di intuizione passeggera ed effimera; in ogni caso le risposte alla sua curiosità non superarono un po’ di sorrisi e commenti superflui. Tuttavia, questa domanda solleva un numero rilevante di problematiche che noi, come primi scopritori ed esploratori del mondo digitale, dovremmo affrontare. Prima però facciamo chiarezza su alcuni concetti; il mondo fisico nel quale gli esseri umani trascorrono la loro esistenza contempla tre dimensioni spaziali e una dimensione temporale. La quarta dimensione è il tempo. Le varie dimensioni si possono però definire in modo diverso a seconda del campo di studio dal quale si analizzano.
Nonostante il commento del mio amico su facebook parta da un concetto erroneo sulla quarta dimensione, il messaggio non è del tutto incorretto. Il suo dubbio si dirige verso una nuova dimensione nella quale gli esseri umani stanno sviluppando la propria esistenza, il ciberspazio. Se viviamo in tre dimensioni spaziali e una temporale, come possiamo definire il mondo virtuale, dove la vita sembra acquisire un significato a parte.
Parliamo di un mondo dove la nostra capacità di astrazione si sviluppa al massimo, dove si prescinde quasi completamente dallo spazio fisico ed anche il tempo sembra trascorrere più velocemente. Parliamo di un mondo parallelo attraverso il quale riceviamo le informazioni, creiamo un’identità e siamo in contatto con un circolo di persone che potenzialmente si può ampliare a piacimento. L’essere umano vive sempre più in un mondo creato da lui, un mondo che si genera attraverso il grande immaginario collettivo dell’umanità, i suoi propri codici sociali, di linguaggio, economici, amorosi, accademici, culturali, artistici, etc.
Si, parliamo di un mondo artificiale che benché necessiti di elementi elettronici per funzionare, galleggia in una forma definita alla quale accediamo ogni volta che accendiamo i nostri dispositivi (quanti e quanto stiamo connessi?) Dimenticando però per un momento la dipendenza fisica della virtualità per funzionare, riflettiamo sullo sviluppo delle nostre esistenze, come insieme collettivo e come individui, tra due realtà che si muovono parallelamente e che stanno cambiando radicalmente il nostro modo di relazionarci con l’ambiente fisico.
Chiaramente esistono due momenti: il momento on e il momento off (è necessario definirlo o lo sappiamo tutti? Sono convinta che lo sappiamo tutti); molti di noi possono sdegnare il momento on, esprimendo il giudizio magari attraverso skype in una discussione di coppia a distanza, come rubi il nostro tempo, come se il tempo off fosse tempo più prezioso del tempo on. Il rimanere la maggior parte del nostro tempo online risulta per molti un aspetto negativo, ma questo post non si propone di entrare in questa controversia. La cosa sicura è che viviamo in un mondo dove abbiamo la possibilità di decidere se vogliamo rimanere ON o OFF, ed entrambi i mondi hanno creato una dinamica nella quale si alternano le funzioni, convivono e scambiano informazioni in forma costante.
Ci troviamo di fronte alla nascita di un territorio nuovo, con possibilità infinite, che sta già portando all’umanità una nuova forma di raziocinio e perché no, conoscenza. Questo territorio sembra un riflesso di noi stessi che si proietta sulle nostre teste, corrente elettrica che corre attorno ad un globo terracqueo, che viene emanata da noi e dall’ambiente nella forma più primitiva, ma che parallelamente circola e connette per la prima volta nella storia, non i nostri corpi ma le nostre coscienze. In questo modo quello che si vive online influenza la nostra vita offline e viceversa, la linea divisoria non esiste, l’essere online è sempre più parte fondamentale della nostra quotidianità come specie. I database degli ospedali, del governo, i contatti con i nostri amici, il biglietto aereo, il treno, il bus, l’università, il lavoro, il denaro, tutto oggi passa attraverso il digitale.
Borges, Huxley, Soja, Foucault, Lefebvre, avevano già parlato di un mondo, dimensione o realtà che supera ogni limite che ci separa: età , storia, geografia, cultura, religione, sesso… Borges descriveva l’Aleph come “uno dei punti dello spazio che comprende tutti i punti.” Nasce quindi questa eterotopia, questo Aleph, questo Terzo Spazio, questo Mondo Nuovo, a partire dalle nostre identità, però senza pregiudizi formali; a partire dalle nostre comunità, senza restrizioni geografiche; dalle nostre conoscenze, senza limiti di retroalimentazione e mutazione; dai nostri gusti e per tutti i gusti. Simultaneamente ci confrontiamo con un tipo di conoscenza molto più complesso che sfida la nostra capacità cognitiva e di attenzione. La conoscenza non potrà mai più essere statica, le costruzioni mentali cambiano continuamente, non c’è nulla di stabile, migliaia di voci parlano nello stesso tempo e mentre si mettono d’accordo nascono le idee che l’attimo successivo si distruggeranno, mondi viventi che sono radicalmente aperti e apertamente radicalizzabili.
Alla fine l’uomo creò per sé stesso una nuova dimensione spazio-temporale dove si può proiettare come coscienza e non come corpo, una dimensione che non è soggetta allo spazio fisico-geografico, una dimensione che ha trasformato la concezione del tempo e velocità e funziona sotto propri standard temporali, una dimensione che appartiene completamente all’immaginario dell’uomo e amplia la realtà geometrica nella quale siamo vissuti finora. Un luogo senza luogo con migliaia di porte che nello stesso tempo lo isolano e lo aprono a tutti. Una dimensione che rompe con le forme, le grammatiche, le convenzioni, i tabù, che amplia la nostra mente da un pensiero cubico a un pensiero che si estende verso nuove forme, in spazi e direzioni orientati verso prospettive altre, quasi oniriche.
Recentemente osservavo una nave enorme che attraccava nel porto della città e mi domandavo chi c’era dentro e com’erano le loro vite. Mi risulta molto complicato immaginare la vita dentro un hipercubo che naviga in un mare che è sempre lo stesso mare e allo stesso tempo non è mai lo stesso mare. Secondo Foucault, i Navigli (sistema di canali con baricentro Milano) e le loro barche erano la eteropatia per eccellenza. Le navi che attraccano in questo Paese nel pacifico sudamericano arrivano dall’India, Inghilterra, Cina, portano merci, scambi, connessioni, storie, curiosità. Il mondo esiste anche oltre l’orizzonte, non finisce mai. Tutto succede qui e ora, in tutte le parti e in tutti i momenti.
More
Less
Translation education
Master's degree - Università degli Studi di Pavia
Experience
Years of experience: 14. Registered at ProZ.com: Apr 2013.